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Imagen promocional de la serie documental 'Sapo, S.A.'.
Es la primera vez que uno de los autores del atraco al Banco Popular de Yecla le pone una cifra al dinero robado en el butrón más rentable para los cacos de los cometidos en España. Amazon ha estrenado una serie documental protagonizada por Jon Imanol Saphiela Candela, alias El Sapo. Se trata de uno de los trece ladrones que intervinieron en la Navidad de 1998 en este asalto.
El Sapo se pone delante de las cámaras para dar detalles de su amplia trayectoria delictiva. La serie, denominada 'Sapo, S.A.', recorre en varios capítulos los mayores 'logros' de este psicópata. Él mismo reconoce que está diagnosticado como tal, que fue amigo y enemigo de Ángel Suárez 'Casper', considerado este último el cabecilla de la organización que asaltó la entidad bancaria.
En el reportaje de la productora Mediterráneo se pueden sacar varios datos aportados por El Sapo, quien vivió en primera persona lo que pasó en diciembre de 1998. El más destacable es la cifra del botín: «Nos llevamos 2.700 millones de pesetas». Hoy serían algo más de 16 millones de euros. Hay que tener en cuenta que los propietarios de las cajas reventadas en la Nochebuena de aquel año declararon que les habían robado 4,8 millones de euros.
El Sapo fue el encargado de trasladar en una furgoneta primero y luego en un turismo aparcado en Almansa el dinero hasta Madrid. Después lo repartió con 'Casper'. Según su testimonio, la banda abrió 89 cajas de las más de 200 que había en la cámara del banco yeclano. «Mi objetivo era llevarme 400 millones de pesetas. No me imaginaba lo que íbamos a encontrar», reconoce en el documental. Comenta que en la primera caja encontró 60 sobres y en cada uno de ellos había un millón de pesetas. «¡Dios es grande y Papá Noel más!», exclama.
Utilizaron bolsas de basura del banco y tuvieron que dejar allí la máquina perforadora. «Eso fue un error», comenta, ya que permitió a los investigadores tirar del hilo para localizar a la banda. Con esa máquina hicieron dos agujeros. El primero encontró un tabique en el camino que redujo el diámetro de la entrada a la cámara donde estaban las cajas fuertes. El segundo fue el bueno, aunque «Casper no pudo entrar porque estaba muy gordo».
«Allí, además de mucho dinero, había dos kilos de cocaína, objetos sexuales, un bocadillo, una caja de zapatos, la corona de la Virgen...», relata el protagonista del reportaje, quien reconoce que «nunca pensé que podría haber tanto dinero en ese banco». Este experto en robos asegura que accedió en el banco «como Papá Noel», por la puerta, ya que habían cambiado el bombín por uno maestro que permitía que cualquier llave de la misma marca pudiese abrir la puerta. Uno de los momentos que también aporta algo nuevo sobre el caso es cuando se le pregunta cómo se enteró la banda de que en Yecla había tanto dinero en ese banco. «Hubo una persona que dio cuenta de lo que pasaba en Yecla», pero El Sapo no da su nombre. «Que nadie hable mal de él en su pueblo», dice. A pesar de que El Sapo estuvo declarando en el juzgado, nunca se le llegó a acusar de nada y quedó libre por este asunto.